No te sientas mal si hay cosas que no puedes solucionar por ti misma. No por ser la madre del bebé tienes que saber todo lo que le pasa. Hay algunas ocasiones en que es mejor visitar al médico para evitar un mal mayor. A continuación nombramos algunas importantes:

• Cuando el recién nacido sufra algún tipo de golpe o caída, el pediatra determinará su estado.
• Si el bebé tiene fiebre alta (más de 38º) y no la puedes controlar a tiempo, puede ser más peligroso.
• Si el recién llegado tiene vómitos o diarreas y persisten por más de 24 horas. Puede sufrir una deshidratación y el doctor sabrá que administrarle para que esto no ocurra.
• La falta de apetito en el bebé puede ser que causada por algún virus. No debes dejar que pasen más de 24 horas sin que se alimente ni beba agua, esto puede ser otra causa de deshidratación.
• Evidentemente, si el recién nacido sangra por algún orificio (genitales, oídos, boca, nariz, ojos o el cordón umbilical) debe de recibir atención médica inmediatamente. De lo contrario podría sufrir alguna infección.
• Si el bebé tiene algún tipo de erupción en la piel, y ésta se prolonga, puede ser debido a alergias o bien por la alimentación, a algún tipo de tejido, e incluso alguna de las cremas que utilice. Es por ello que la mejor opción que puedes tomar e sla de consultar a un especialista. Él encontrará la causa y te dará una solución.