Pasar al bebé de la cuna a la cama es una decisión que depende en gran medida del desarrollo del niño y de las preferencias de sus padres. Con todo, lo habitual es que el bebé deje de dormir en cuna en torno a los 18 o 20 meses.
Éste es un paso importante para su madurez y debes ayudarlo a entender que la cama es el mejor lugar para dormir. Poco a poco el niño se irá acostumbrando y dejará de echar de menos la cuna. La forma de afrontar esta situación depende mucho de cada niño y de su carácter, por eso, debes estar pendiente de su comportamiento y ayudarle a adaptarse.
Al principio, muchos padres utilizan barandillas o barreras, o rodean la cama de cojines, para evitar que el niño se caiga y coja miedo a dormir solo.